Querid@s honobonian@s:
Empujados por el destino, como simples hojas de otoño a
merced del vendaval, tres miembros de una misma familia recorren Japón de norte
a sur en busca del padre, del que no tienen noticias. Zushio, con solo 12 años,
su hermana Anju y la madre de ambos conocerán el engaño, la crueldad y la
esclavitud, pero también la piedad, el poder revelador de los sueños y el
milagro.
Para Zushio, el atormentado viaje había empezado en
Shinobugori, cerca de la actual Fukushima, y terminará en uno de los salones
del templo Kiyomizu-dera de Kioto. Una enigmática figurita de oro del Jizo
Bosatsu lo acompaña en su periplo, que supone no solo un recorrido geográfico
preciso sino también el descubrimiento de los impulsos que hab itan el alma
humana, encarnados en los personajes que aparecen en la narración.
Ogai Mori escribió la historia en 1915, inspirándose en un
relato anónimo anterior, y Mizoguchi la llevó al cine en 1954, obteniendo el
León de Plata en el Festival internacional de cine de Venecia de ese mismo año.
Para muchos supuso su consagración definitiva en Occidente.
La versión cinematográfica de El intendente Sansho de Mizoguchi compone una revisión personal e
innovadora del relato original que no entra en confrontación con el cuento de Ogai
Mori. Por otra parte, las cuarenta páginas que ocupa este permiten disfrutar,
incluso al lector más atareado, de los matices y cambios estilísticos que
adornan la narración principal, que van desde la descripción concisa de los
ambientes y personajes, hasta la relación pseudohistórica de los antecedentes
de la familia de Zushio o de las medidas que decretará convertido en el
gobernador Masamichi, por ejemplo.
Teniendo en cuenta que Ogai es, junto a Soseki, uno de los
padres de la narrativa japonesa del siglo XX, que ayudó a conformar el “léxico
de la modernidad” y que desempeñó una labor decisiva como traductor y
divulgador de la literatura occidental durante el periodo de Meiji, vale la
pena detenerse en la contemplación de su estilo y en la ajustada elección de
recursos con que elaboraba sus cuentos, que podréis percibir gracias a la
excelente traducción de Elena Gallego. El libro, que recoge otros cinco cuentos
del autor, viene acompañado, además, por un interesante estudio preliminar de
Carlos Rubio.
Ogai Mori: El
intendente Sansho, traducción de Elena Gallego, prólogo de Carlos Rubio,
Contraseña Editorial, Zaragoza, 2011.
El próximo martes día 22 a las 19:00 h. en Lfont Tea
Mountain hablaremos del libro y proyectaremos la película de Mizoguchi:
El intendente Sansho
(Sanshô dayû) Japón, 1954
V.O. con subtítulos en castellano
B/N Duración 120 min. aprox.
Un abrazo
Pedro Pablo Ontoria